Decodificando lo Robusto 4: MIL STD 810G
A medida que continuamos nuestra serie de descodificación del lenguaje utilizado por los fabricantes de hardware resistente, movemos nuestra atención a una de las certificaciones más citadas MIL STD 810G.
Cada dispositivo robusto que vemos orgullosamente cuenta con el código mágico MIL STD 810G en algún lugar en las especificaciones, pero ¿qué significa exactamente y por qué es tan importante?
Bueno, aunque pueden haber adivinado MIL STD es una abreviación para el estándar militar. De hecho, es un estándar militar estadounidense que, y tiene sus orígenes con la Fuerza Aérea de EE.UU y luego en un acuerdo tri-servicio entre el Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea de EE.UU fue adoptada finalmente como estándar militar. Sin embargo, la norma es ampliamente adoptada entre los productos comerciales que necesitan ser capaces de aguantar a las pruebas ambientales rigurosas.
Si alguien se preguntaba que significa la G al final, se refiere a la revisión actual del documento de certificación y se está usando la revisión G desde 2008.
Directrices Generales del Programa
La primera parte de la MIL-STD-810G es un conjunto de directrices generales que describen la gestión, la ingeniería y las funciones técnicas en el diseño ambiental y el proceso de adaptación de pruebas.
Se centra en el proceso de adaptar el diseño y los criterios de prueba a las condiciones ambientales específicas que un equipo es susceptible de encontrar durante su vida útil.
Métodos de prueba de laboratorio
El segundo elemento de MIL-STD-810G se centra en los métodos de prueba de laboratorio ambientales que se aplicarán utilizando las directrices de adaptación de pruebas descritas en las directrices generales del programa.
Con excepción del método de prueba 528 (Vibraciones mecánicas de equipos a bordo), estos métodos no son obligatorios, sino que el método apropiado se selecciona y se adapta para generar los datos de prueba más relevantes posibles.
Cada método de prueba también apoya al ingeniero de prueba describiendo las instalaciones y metodologías de prueba de laboratorio preferidas. Estos procesos de ingeniería y gestión ambiental pueden ser de enorme valor para generar confianza en el valor medioambiental y en la durabilidad general de los equipos y sus materiales.
Sin embargo, debe tenerse en cuenta que siempre hay limitaciones inherentes a las pruebas de laboratorio que hacen imperativo utilizar el juicio de ingeniería al comparar los resultados de laboratorio acerca de cómo un dispositivo puede hacer frente en entornos reales tales como las variables ambientales reales (especialmente cuando se combina con otras variables) ya que estas no pueden simularse de forma práctica o confiable en los laboratorios de ensayo.
Dicho esto, el MIL STD 810G es aceptado como un estándar mundial cuando hablamos de robustez de los dispositivos para uso militar, o industriales.
Las pruebas en sí varían en un rango de diferentes variables ambientales que incluyen:
- Rangos de temperatura
- Choque
- Vibración
- Humedad
- Niebla salada
- Atmósfera explosiva
Así como una serie de otras variables ambientales.
Sin embargo, un dispositivo puede ser probado y certificado como MIL STD 810G para cada uno y cualquiera de estos ensayos individualmente y no son mutuamente dependientes entre sí. Así, por ejemplo, un dispositivo podría probarse con MIL STD 810G para choque (prueba 516) solamente sin tener que poder pasar ningún otro criterio MIL STD 810G.
En cuanto a los dispositivos resistentes, quizás la más importante de estas pruebas son las pruebas de choque, temperatura de funcionamiento y vibración. Hay pruebas MIL STD 810G para la entrada de polvo, así como el ingreso de fluidos, pero en general la mayoría de los fabricantes siguen con el sistema de clasificación IP para estas áreas.
Prueba 516: Choque
Casi seguramente la más citada de las pruebas MIL STD 810G por fabricantes robustos, es el método de prueba llamado prueba de “caídas” (drop test), ya que mide la capacidad de un dispositivo para soportar los impactos, cuando este se cae desde ciertas alturas.
Las pruebas están diseñadas para verificar cuánto abuso físico puede soportar un dispositivo y mantenerse en funcionamiento. Hay ocho procedimientos diferentes para elegir y cada uno utiliza diferentes formas de choque o impacto, pero de estos el más común es el procedimiento IV.
Las pruebas tiene distintas extensiones dependiendo el peso del dispositivo, pero generalmente las tabletas, teléfonos y computadoras portátiles caen en la primera categoría (pesos de menos de 45 kilos y alturas de menos de 91 cm). Los dispositivos se caen de una altura de 4 pies (1,2 mt) en cada uno de sus seis caras, 12 bordes y 8 esquinas, sobre un piso de madera de dos pulgadas construida sobre hormigón (que aparentemente es la superficie más común donde probable caiga un dispositivo). A continuación, los probadores inspeccionan visualmente los daños y determinan si el dispositivo sigue funcionando después de cada caída.
“Probado para” Vs. “Diseñado para”
Un problema con la prueba MIL STD 810G es que puede ser muy caro y es importante recordar que MIL-STD-810 no es una especificación per se, sino un estándar. Una especificación establece criterios absolutos que deben cumplirse para “cumplir con las especificaciones”. MIL-STD-810 como estándar proporciona métodos para probar el material para su uso en diversos ambientes, pero no proporciona límites ambientales absolutos.
Por lo tanto, algunos OEMs saltarán toda la segunda parte de MIL STD 810G (la parte de la prueba real) y aún así afirman que sus dispositivos están diseñados para cumplir con los estándares MIL STD 810G.
Posiblemente estos dispositivos pueden ser más que capaces de sobrevivir a los rigores de los ingenieros de campo en sus días más duros, pero, simplemente comprobado que realmente pueden hacerlo.
Lo que hace MIL STD 810G, sin embargo, especialmente cuando se trata de la “prueba de caída” es darle una base de conocimiento acerca de lo que puede esperar de la resistencia de un dispositivo.
